OPINIÓN El “embole” de la enseñanza

Problemas en la enseñanza hay variados y de toda índole, como actividad tan vasta y compleja que es.

por Jorge Pasculli (uno de nosotros)

Pero hoy quiero referirme a uno bien específico y muy importante: el deseo de aprender, el interesarse activamente por las cosas. Para mi uno de los principales fines de la educación. Que despierte en nosotros el deseo de aprender, aprender a buscar, a experimentar, a sentir la satisfacción del conocimiento alcanzado.

Y esto se puede hacer toda la vida y no necesita costosísimos materiales, ni siquiera computadoras. Sí se necesita que en vez de atribular a los alumnos(de cualquier edad) con largas horas de clase(la mayoría teóricas) sobre las más diversas materias dictadas por profesores distintos(en el caso de los liceos), la relación educativa sea un encuentro vivo, activo, participante, a partir de un hecho concreto que interese al alumno y a partir del cual –mediante preguntas al viejo estilo Sócrates- pensemos y descubramos juntos. A nivel de la escuela se ha avanzado mucho en este sentido.

La estructura de clase liceal complica mucho la posibilidad de una educación activa, viva, entusiasmante. A gran parte de los adolescentes les “embola” absolutamente, es como una tortura, más allá de que la madre necesite la asignación familiar para mantenerlo. Esta estructura de secundaria termina por agotar a los profesores que corren de un liceo a otro, tratando de interesarlos sobre la Divina Comedia, después de una clase de química y antes de otra de física. Con la mejor intención intentan buscarle el sentido a su materia, de bajarla a tierra antes de que el fastidio de algunos contagie a la mayoría.

Los jóvenes necesitan aprender a aprender y experimentar, pero también a descubrir cuales son los valores con los cuales se empiezan a identificar, es fundamental que esa gran oportunidad de tenerlos varias en un lugar sirva para dialogar y reflexionar sobre los temas de la vida de hoy, aquellos que les preocupan.

No es culpa de nadie, pero hay que empezar a buscar una educación que los entusiasme, sino los perdemos.