Educación en Corea

Corea del Sur

Pruebas PISA 2009 (65 países)

Matemática: puesto 4
Ciencia: puesto 6
Lectura: puesto 2
Presupuesto en relación a PBI: 4,8% (2008)
Gasto por estudiante en secundaria (porcentaje del PBI per cápita): 23, 2% (2008)
Organización: La enseñanza básica y media es gratis y obligatoria. El sistema educativo consiste en seis años de primaria, otros seis de secundaria y de dos a cinco años de educación superior, dividida entre institutos técnicos y universidades. La administración está centralizada y el Ministerio de Educación (MOE) tiene la responsabilidad primordial sobre las políticas y la administración de la educación. Sin embargo, hay municipalización y autonomía de los centros para asignación de recursos y personal.
Las universidades en Corea funcionan bajo límites de inscripción. La selección de cada aspirante es determinada por los expedientes de su secundaria y los resultados de una prueba estandarizada a nivel nacional.

Debates: El sistema recibe críticas por ser elitista, por poner mucha presión sobre los alumnos, por dejar de lado la educación física, por el excesivo individualismo de los estudiantes y la falta de espíritu comunitario, por no promover el pensamiento creativo y estar demasiado centrada en los exámenes y la excesiva competitividad. También se cuestiona la cantidad exacerbada de horas extracurriculares destinadas a actividades de formación. El Comité Presidencial lanzó una reforma en 1995 para modificar ciertos aspectos referentes a la flexibilidad del sistema. El suicidio es un problema que genera gran preocupación; de hecho Corea es el país con más tasas de suicidios del mundo desarrollado y representa la primera causa de muerte entre los menores de 40 años. El fenómeno, que se ha duplicado desde la década de los noventa, es especialmente acuciante entre los estudiantes.

Resultados de las pruebas Pisa: Corea se mantuvo en los primeros puestos en las sucesivas ediciones de las pruebas. Los informes señalan, además, la equidad del sistema educativo, ya que las escuelas tienen un rendimiento promedio muy similar y la relación entre el nivel socioeconómico de los alumnos y su rendimiento escolar es muy débil.