El problema no es lo que te pasa, sino como reaccionas tu frente a lo que te pasa.
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viernes, 7 de mayo de 2010

+ Una entrevista a Isabel Allende, interesante

Allende y el legado de su hija: "Uno sólo tiene lo que da"

Novela. Acaba de editarse en EE.UU. "La isla bajo el mar"

NUEVA YORK | S. RATNER-ARIAS / AP

Al igual que Alejo Carpentier cuando escribió "El reino de este mundo", Isabel Allende se fascinó con la historia de Haití, sus desgracias y sufrimientos, que reflejó en su más reciente novela "La isla bajo el mar".

Pero aunque la escritora chilena considera importante que el país más pobre del continente esté en la noticia, no quiere que su libro se considere obra del oportunismo debido al terremoto devastador que conmovió Haití. "Es una coincidencia terrible``, dice la autora de éxitos editoriales como La casa de los espíritus en Nueva York.

"Me sentí mal de que el libro fuera a salir ahora (en inglés) y pudiera parecer como un aprovechamiento de las circunstancias, pero por otra parte me parece tan importante que Haití esté en las noticias, que esté en el mapa otra vez y que la gente esté hablando de Haití, que es un país realmente maravilloso y necesita ayuda``, expresó Allende, de 67 años. "Pero no ayuda que le regalen cosas. Haití necesita manejar su propio destino y eso es lo que la gente quiere hacer``.

La idea original para la novela era situarla en Nueva Orleans, pero su investigación terminó en la isla. "Me di cuenta que el sabor francés de Nueva Orleans, la cocina, el vudú, muchas de las costumbres vienen de 10.000 refugiados que salieron de Haití durante la revolución de los esclavos a finales del 1700, comienzos del 1800, y muchos llegaron a Louisiana``, relató. "Entonces empecé a investigar las circunstancias que los obligaron a salir y así di con la revolución haitiana, que es fascinante``.

El libro, cuya edición en inglés acaba de ver la luz en Estados Unidos, sigue a Zarité Sedella, una esclava en el Saint-Domingue (Haití) de finales del siglo XVIII que tuvo la buena fortuna de no conocer el agotamiento de las plantaciones de caña ni la asfixia y el sufrimiento de los trapiches, porque siempre fue una esclava doméstica.

"Este libro está colocado hace 200 años (pero) el tema de la esclavitud tiene una vigencia horrenda hoy``, lamentó Allende. "Hay 27 millones de esclavos en el mundo hoy día ... y no estamos hablando de las niñitas en los burdeles de Camboya solamente, sino de gente que está en servidumbre de deuda, por generaciones a veces; aldeas completas que trabajan en agricultura, en la pesca, en la madera y de toda clase de `sweatshops` (fábricas en las que se explota a los trabajadores) en las que la gente trabaja en condiciones de esclavitud``.

"Cuando hay tanta pobreza, cuando hay tanto abuso, yo creo que eso hay que decirlo lo más que se pueda. Crear consciencia sobre eso``, afirma. "Hoy (estos esclavos) son desechables, como los vasos de papel. Te puedes comprar una persona por 20 dólares, 30 dólares. En Haití... hay 300.000 niños que son esclavos domésticos, algunos de cinco, seis años. Y ni siquiera los venden, los regalan porque los padres no los pueden alimentar``.

PROCESOS. La investigación le tomó unos cuatro años. Escribirlo, uno más. "Cuando empiezo a escribir lo que tengo es el tiempo y el lugar bien investigado. Tengo toda la documentación sobre lo que pasó en ese momento en ese lugar y nada más``, dice. "Me demoré como dos años en tener la materia prima, pero no pude escribir el libro porque no tenía a Zarité, no tenía la voz de ella, todavía estaba como muy cruda la historia``, explicó. "Un día la verdad es que no sé si soñé con ella o se me apareció cuando estaba meditando, pero la vi entera. Y ya cuando tuve a Zarité con su personalidad, con su cuerpo, su cuello largo, sus manos elegantes, su voz, pude escribir el libro fácilmente``.

Zarité, al igual que muchas de las mujeres a las que ha dado vida en sus páginas, está llena de fuerza, sensualidad y heroísmo. "Yo no invento las mujeres. He trabajado toda mi vida con mujeres y para mujeres. Las conozco bien y si tú me preguntas dónde hay mujeres débiles no sé, porque la mayoría tienen vidas difíciles y son la mayoría muy fuertes``, dice la autora de Eva Luna.

"A veces dos personas me sirven para un personaje y en el caso de Zarité yo creo que la gente que vivió hace 200 años no es diferente a la de hoy. Todos sentimos las emociones de la misma manera: el amor, el odio, la codicia, el sufrimiento, el dolor, la separación. Todos sufrimos igual``.

Y aunque sabe muy bien de sufrimiento -perdió a su hija Paula, a quien le escribió un famoso libro- afirma estar agradecida de la vida que ha tenido.

"Yo creo que es muy poca la gente que puede pasar por la vida sin haber sufrido. Y mi sufrimiento no es diferente al de otros ni es mayor. Celebro cada día y creo que lo que llevó a mi hija, el mantra de mi hija, la frase de mi hija que la mantuvo actuando durante los 28 años de su vida era que uno sólo tiene lo que da``, dijo. "Cuando llamaba a mi hija que era psicóloga por teléfono pa` contarle algún problema le decía, `¿Qué hago Paula?` Me decía, `Mamá, ¿qué es lo más generoso que se puede hacer en este caso?` Y eso siempre sirve. Si tú haces lo más generoso que puedas hacer en ese caso generalmente las cosas salen bien`

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